Aprendiendo a leer
Tres de los aspectos que más relevancia tienen para el correcto desarrollo escolar de los niños son: el habla, la lectura y la escritura. En esta entrada nos vamos a centrar el aprendizaje de la lectura que tanta importancia tiene en la escuela, ya que es el medio a partir del cual los niños adquieren los conocimientos.
La edad en la que se comienza a enseñar a los niños a leer varía dependiendo del centro escolar, pero sí podemos afirmar que en torno a los 5 años de edad, los niños ya empiezan el aprendizaje de la lectura mediante la identificación y el reconocimiento de las letras.
Existen dos etapas bien diferenciadas del aprendizaje de la escritura:
- La primera etapa es la alfabética: en la que los niños empiezan a establecer las primeras relaciones entre las letras y los sonidos que corresponden a cada una de ellas. La correcta asignación del correcto sonido a cada letra supone uno de los pilares más importantes que va a definir su desarrollo lector en la etapa posterior. El desarrollo de la etapa alfabética es muy importante porque establece los cimientos para el progreso lector. Gracias a la lectura repetida de palabras mediante convirtiendo cada letra en su sonido, los niños van a empezar a formar huellas ortográficas que le ayudarán a leer cada vez más rápido, con más precisión y con menor esfuerzo.
- La segunda etapa es la ortográfica: en la que los niños ya dominan la correspondencia de cada letra con su sonido y esto ha llevado a que se formen las representaciones ortográficas de un gran número de palabras conocidas. La formación progresiva de este almacén de palabras hace que, cuando el niño ve una palabra la pueda leer de forma rápida y directa. En esta etapa los niños ya han automatizado la lectura lo que conlleva una lectura más rápida similar a la de los adultos.
Dificultades en el aprendizaje de la lectura
Los principales problemas que entorpecen el aprendizaje de la lectura afectan a la relación entre el sonido y la letra, es decir, que los niños no saben cómo se pronuncia o como suena cada letra. Esta dificultad provoca que la automatización de la lectura se produzca más tarde y puede ocasionar dificultades en la comprensión del lenguaje debido a que la atención del niño está centrada en saber que sonido corresponde a cada letra y esto le impide alcanzar el contenido del texto.
Algunos de los signos de alerta que tenemos que tener en cuenta cuando el niño lee son las adiciones de letras en una palabra, las omisiones de letras, sustituciones de letras o palabras o inversión de sílabas (se en vez de es) entre otros. En muchas ocasiones los niños cometen estos errores durante la lectura cambiando el contenido del texto y no son conscientes de ellos, esto nos indica que no está llegando a la comprensión del texto.
Si se detectan dificultades en el aprendizaje de la lectura es importante acudir al logopeda lo más tempranamente posible, para solventar el problema en una edad temprana y así evitamos que repercuta en otras áreas como en su autoestima o en el aprendizaje de los contenidos escolares.
Leer mejor
Para solventar las dificultades de lectura es necesario acudir al logopeda evaluar la lectura del niño y así detectar las dificultades y trabajar en aquellos aspectos que sean necesarios mejorar.
Para mejorar la precisión lectora, el logopeda diseñará para cada niño una serie de textos y palabras específicas que ayudan a mejorar la lectura letra a letra. Cuando este proceso este automatizado, habrá aumentado la precisión lectora y el niño leerá de forma más fluida y además, mejorará su comprensión. Además se trabajarán otras áreas como la escritura o la conciencia fonológica que ayudarán a la mejora de la lectura del niño.